La FCC Prohíbe el Uso de Voces Artificiales en Robocalls
La nueva normativa, que entra en vigor de manera inmediata, prohíbe específicamente el uso de tecnología de clonación de voz en las cada vez más comunes estafas de robocalls dirigidas a consumidores. Estas llamadas, que a menudo buscan engañar a las personas para obtener información personal o financiera, han sido un problema creciente en los últimos años.
Según la FCC, las llamadas realizadas con voces generadas por IA se consideran «artificiales» bajo una ley federal de 1991 que tiene como objetivo reducir las llamadas no deseadas. Esta definición amplía el alcance de la ley y fortalece las herramientas de las que disponen los estados para perseguir y sancionar estas prácticas ilícitas.
Un Paso Adelante en la Protección del Consumidor
La decisión de la FCC representa un avance significativo en la protección de los consumidores contra las estafas telefónicas. Con la tecnología de voz sintética cada vez más sofisticada, los estafadores han encontrado maneras de eludir las medidas de seguridad existentes, haciendo que sus llamadas parezcan más legítimas y engañando a más víctimas potenciales.
Impacto de la Nueva Regulación
La nueva regulación otorga a los estados una nueva autoridad para actuar contra los esquemas de clonación de voz generados por IA. Esto significa que las autoridades locales tendrán más capacidad para perseguir a los infractores y proteger a los ciudadanos de estas prácticas engañosas.
La medida de la FCC se alinea con los esfuerzos continuos para actualizar las regulaciones y mantener el paso con las tecnologías emergentes que a menudo son explotadas por delincuentes para cometer fraudes. La claridad en la legislación es un paso crucial para asegurar que las leyes se mantengan relevantes y efectivas en la era digital.
La FCC ha reafirmado su compromiso de trabajar junto con las agencias de aplicación de la ley y los consumidores para identificar y detener las llamadas automáticas ilegales. Con esta nueva regulación, se espera que haya una disminución en el número de estafas telefónicas que utilizan la voz sintética, proporcionando así una mayor seguridad a los consumidores.